martes, 23 de septiembre de 2008

Regalarse los oídos

Ante todo, estimados amigos, perdón por mi ausencia. Espero que no vuelva a repetirse, al menos tan larga. Y en mi vuelta os traigo un tema que el lanzamiento del nuevo iPod Nano me ha traido a la memoria, y al que hace tiempo quería dedicar un post.

Porque, vale, tienes el juguetito de la manzana, y lo disfrutas de lo lindo con tus auriculares (los que trae de serie no están mal, pero tengo entendido que con los auriculares de Bang&Olufsen ya es para subir a los cielos), pero como la filosofía de este blog es compartir lo bueno, hoy vamos a daros ideas para que compartáis con los que os rodean esa estupenda música que, a buen seguro, llevaréis en vuestro iPod. Porque todos los que lo tenéis estaréis de acuerdo en que el sistema estéreo está empezando a coger polvo por desuso (yo debo confesar que, como soy un nostálgico, tengo en mi despacho un estéreo Sony de los 70 con indicadores de aguja, mandos de rueda y giradiscos que uso a menudo, y que suena de escándalo a través de unas cajas de las de toda la vida, grandes, de madera y con sus membranas al aire vibrando).

Hace más de 3 años que disfruto de la primera base amplificadora seria que se lanzó para iPod, el Bose Sound Dock. Con mi Sound Dock he bailado en casa, he oído música en los momentos más diversos y he viajado (allá donde he ido, con mi bolsita, con la música a cuestas). Sin embargo, he de confesar que hace unos meses me rondan pensamientos impuros y fantaseo con ser infiel a mi Bose con el Zeppelin de la casa de sonido semiprofesional Bowers&Wilkins, que es purito diseño. Pero luego me puede el amor, y la falta de presupuesto, y decido seguir con lo que tengo.

También es reseñable entre las bases de alta gama la Go + Play de harman/kardon. Eso sí, suena muy bien, pero me recuerda a un radio-casette de los antiguos.

No obstante, estamos en tiempo de crisis. Y en verdad os digo, hermanos, que esta no es razón para privarse de la música. Hay opciones más normalitas y asequibles, pero de muy buena calidad de sonido, como el Radial de JbL, otra casa semiprofesional, que también ofrece una opción aún más barata y que da un resultado estupendo: la base On Stage.

Ahora bien, si lo que quieres es distanciarte y epatar a tus amistades, y puedes estirar el presupuesto, nada como un amplificador de válvulas (¿quién nos lo iba a decir? Purismo mezclado con vanguardia). Entre ellos, si puedo, elijo el Music Cocoon MC4, con el que dejarás helado al más pintado, de Roth Audio (que también firma el soberbio ALFiE, que no es de válvulas, pero lee CD, tiene radio y despertador). ¿Inconvenientes del MC4? Cuesta unos 600 € y, además, necesita unos altavoces (¿qué menos que unos Bowers&Wilkins 686, que salen por otros 450 € el par?). Eso sí, por unos 1.000 € dejarás con la boca abierta a todo Cristo, y rozarás el éxtasis escuchando la música. Otra opción en válvulas es el Orbitsound T6, que aunque anunciado y objeto de mil comentrios en la Red, aún no está a la venta, pero pronto llegará, a 199 pounds (con el cambio, saldrá por unos 240 €). ¿Ventajas? No es caro, no necesita altavoces adicionales, y es distinto.

También con radio el iYiYi, de la casa Tivoli, que ha hecho siempre unas soberbias radios (engañan, porque no aparentan sonar lo bien que suenan), y que se luce con esta joyita.
Hay muchas otras opciones (Logitech, Altec Lansing, etc.) y más que irán saliendo. Pero aquí os he puesto mis favoritas. Si alguien quiere hacerme un regalo, no dirá que no le doy ideas.

Foto. El Zeppelin de B&W. Purito diseño.

P.S.: Aunque no lo dicen las webs de los aparatitos, he de deciros un secreto. Arriesgándome más allá del deber, he usado mi iPhone 3G en varias bases y.... ¡¡¡funciona!!! (en algunas te dice que no carga y tal, pero ni caso).

3 comentarios:

  1. Yo también me apunto al Zeppelin, es una preciosidad, aunque de momento sigo feliz con mi Bose. Por cierto, que la última versión se ha afinado un poquito y lleva la base desplazable, de forma que queda escondidita cuando no se usa, más estético y a prueba de polvo.

    Hmmm... una de las primeras cosas que hice con el iPhone fue probar si funcionaba con ella y me dijo que no... tendré que insistir, a ver si me pasa como a ti.

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  2. Por cierto, que los nuevo nano son una divinidad. No sabría con cuál quedarme, tal vez con el amarillo. Lo ideal sería tenerlos todos, para combinar con la ropa de cada día.

    Y, sí, los auriculares de Bang&Olufsen valen la pena, aunque son un poco latosos si te los pones y los quitas con frecuencia porque llevan patilla para que queden bien sujetos y, además, cada vez que te los quitas te da dolor de corazón no recogerlos con cuidado en su fundita, así que dan su trabajo.

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  3. Doy fe, he probado el iPhone en mi Bose, obviando sus advertencias y renunciando al modo avión para la reducción de interferencias y, no, no carga, ¡pero suena estupendamente!

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